06 April 2010

Desde cuando la filosofía le da lecciones a la naturaleza,

Desde cuando llevo este agujero en mi cabeza

Taponado por supuestos tan añejos como el tiempo.

No me he olvidado y de cabeza me siento al mundo,

Corriendo hacia atrás me he disuelto en la eternidad,

Y con la copa clavada al hocico empino el codo que se me ofrece con descarada cortesía.

¡Hombre arrojado a las rocas del destino porque no te partes!

Invitados hinchados como piojos de tanto chupar se cuelan hasta el hastió.

Y en esta pegajosa cosa llamada civilización me echo a dormir.

Cuento ovejas, horas que caen desde lo alto me mojan.

Soy un ánima gritando al oído, con palabras secas.

La máscara ha caído partiéndose en mil pedazos

El rostro descubierto se exhibe.

Te veo, ¡me vez!

Corriendo de extremo a extremo no hay donde ocultarse.

No comments: