09 September 2009

En esta semana que se va, y en la cual esta todo chile pendiente de once sujetos vestidos de rojo, aparecen mis cuestionamientos respecto al fútbol y de los alcances que estas reflexiones pueden tener.
En mi foro interno pienso que cuando se juega fútbol a nivel de selección nacional, lo que muestra una selección es como es el fútbol de su país, si la selección es mala esta diciendo que el fútbol en su país es malo simple y llanamente.
Yo soy chileno y se que el fútbol en mi país es malo, aunque algunos se le vengan nombres de antaño o actuales, la realidad no deja de darme la razón, el fútbol en mi país es malo, es por eso que no importa que venga el dios del fútbol, no se puede revertir ni cambiar la realidad. Pero si nos podemos enorgullecer de que tenemos talento para los deportes individuales, tenemos campeones a nivel mundial y de ellos nada sabemos, producto que toda la atención esta puesta en una pelota y once sujetos. Pero la atención que se le da al fútbol no es por que sea un gran deporte es por que el fútbol al mover masas genera una gran cantidad de dinero cosa que los otros deportes no pueden hacer.
Ciertamente alguien puede decir que el fútbol mueve masas porque es un deporte barato que solo se necesita de una pelota y ya, pero quizás el que dice esto no sabe que para poder jugar el deporte de masas de forma seria si se necesita de recursos al igual que los otros deportes; si puedo decir con franqueza que los otros deportes no son nada de baratos cuando uno los ejerce seriamente ya que para competir no hay auspiciadores, con lo cual los costos son mucho mas altos al tener uno que subvencionarse los costos de estos deportes.
Otro dato importante es que si la selección de un país es mala esta diciendo que el deporte en su país es malo, ya que los recursos que se destinan para que esta selección se muestre no son los mas óptimos y mas aun esta diciendo que la salud del país no es buena ya que el deporte es sinónimo de salud y si los deportistas que mando son malos estoy diciendo que la salud en ese país es mala sin entrar a escarbar un poco mas afondo.
Puedo terminar de decir que no encuentro que hayan malos deportistas en mi país si no que están mal preparados ya que las condiciones para el deporte que uno elija no están dadas, es por eso que cuando se converse del deporte que se quiera sea de forma seria teniendo presente que los milagros no existen y que los resultados deben ser pensados en las condiciones que generamos para tener buenos resultados.
A. Nain.

03 September 2009

He corrido casi 30 minutos, mirando hacia atrás, buscando divisar si es que alguien me sigue. Maldita sea me pregunto parado en la oscuridad como puede haber tanto mal nacido en esta puta ciudad.
Estoy más machucado que membrillo de colegial y mi ropa esta echa jirones, solo el hecho de recordar lo sucedido me hace doler el cuerpo. Hecho mi última mirada hacia atrás antes de echarme a caminar riéndome de lo sucedido y moviendo la cabeza de un lado hacia otro.
He entrado a un bar de poca monta ubicado en plena alameda o eso se me viene a la memoria, no hay mucha gente solo unos cuantos parroquianos, alumbrados por una luz tan tenue que los rostros parecen disfrazados por la noche. Se me acerca una chica la cual me pregunta que es lo que me voy a servir parándose a un costado de la mesa, yo presintiendo la pregunta le digo una Escudo y si me puede traer un cenicero.Trago unos cuantos sorbos de cerveza acompañados por una gran nube de humo. La verdad es que no me ciento con ganas de parrandas esta noche, así que decido largarme y volver a la calma de mi hogar. Salgo por la puerta prendiendo un cigarrillo pensando en nada distraído por todo, no alcanzo a dar cinco pasos y soy sacado de mi mismo por un pobre Gil que me machetea un cigarrillo poniéndose frente a mi, yo muy cortes mente cosa que me caracteriza le digo que no tengo y sigo adelante, no alcanzo a pasarlo y me toma por el brazo diciéndome que no sea cagao. Ya sacado de quicio miro mi cigarrillo y le digo sírvete apagándole el cigarrillo en un ojo y aprovechándome del pánico le aforro un saca moco con la otra. No se como ni cuando pero la verdad no se de adonde salio tanto Gil culiao, habían hasta minas rodeándome, así en un dos por tres me estaban machacando, una mina me tiraba el pelo otro Gil me daba de puntapiés y otro me daba duro y parejo en la espalda, de tanto jaleo caigo de rodillas acompañado de una patada en el hoci, rodé por el suelo para poderme zafar de estas cariñosas personas de las cuales ya me estaba haciendo amigo; me paro por acto reflejo y corro acompañado pon una verborrea de alabanzas que daban todas estas personas, cruzo la alameda como si tuviera diarrea por lo rápido que iba, miro hacia atrás y como manada de perros hambrientos veo que me persiguen, cojo un camote, y sigo corriendo con el camote en la mano, me saco la chaqueta que ya estaba echa mierda y meto en un bolsillo el camote, le doy un par de vueltas a la chaqueta y como mazo lo embisto en un par de perros que ya me habían dado alcancé. No es que gocé con estas situaciones, pero que disfruté partir un par de cráneos, lo disfrute; luego de eso me eche a correr. He corrido casi 30 minutos, mirando hacia atrás, buscando divisar si es que alguien me………
A. Nain.
75 grados de alcohol corriendo por las venas, ecos del pasado golpeando mis sienes, mis pasos los siguen burbujas de alcohol que se revientan en cada paso que doy. Ojo por ojo, diente por diente, es así como se pagan las deudas en esta existencia.
Dirigido a la nada con un fiel camarada doy mis pasos en falso por una borrachera que es de aquellas en la cual uno no quiere verse envuelto.
Tropiezo con mis zapatos cada dos pasos, y el estomago lo ido dejando cada tres, espero detenerme pronto, ¡alguien apague mis piernas por favor! que me llevan a la incertidumbre de la noche.
Trato de recuperar la conciencia y el dominio de mi mismo, pero cada vez que me concentro en el exterior es como mirar a través de un ojo de gato, de aquellos que hay en las puertas de ciertos departamentos para vislumbrar quien esta afuera.
No se como, ni por que pero entramos a una sala de pool. Esto es un chiste mal contado
Veo cuerpos, sombras, no hay nitidez todavía, aun así tomo mi taco para al menos apechugar y aprovechar de despabilar, aun sigo en piloto automático.
Mi camarada como Sancho me guía en el juego que iniciamos, para al menos no hacer el ridículo al frente de las bolas de colores que debemos de golpear, y no es que allá corrido a pelear con molinos de viento.
Pero no doy ni una, ni una sola. Pero bueno sirvió para poder tomar el control de mi cuerpo y dejar a un lado el piloto automático que me arrastro tan lejos del hogar. Mi visibilidad aun es nubosa, puedo ver con cierta claridad a tres metros de distancia lo demás se pierde no distingo nada mas allá.
Salimos a la calle nuevamente, con nuevos bríos, con antojo de otra copa u otras copas, ésta noche es eterna sentado en un bar tomando lo que nuestro capital puede comprar.
Nos miramos a la cara y nos largamos del lugar, calabaza calabaza cada uno a su casa.
Nos despedimos en una esquina toda roñosa alumbrada por las caladas de los cigarrillos que por momentos no dejaban de sucederse, cada cual tomo su rumbo.Camine media cuadra y me subí a un taxi dándole las coordenadas de adonde debía dirigirse, no se cuanto tiempo abre estado tragando asfalto subido en este carro, pendiente del taxímetro que no dejaba de pestañearme a mi derecha, sin levantar la voz sacaba cuentas del dinero que tenia en los pantalones o creía tener, lo hice detener a diez cuadras de mi hogar, tome el dinero de mi pantalón el cual no era el que correspondía con la cuenta que se agitaba en mi cara, así que tome el monedero en donde tenía guardado mi capital y lo vacié en mi mano derecha, ni siquiera lo conté lo entregue y con un disculpa me eche a caminar. Las cuadras caminadas se me hacían mas largas entre más me acercaba a mi destino, movido solamente en estos momentos por el deseo de la cama que acoge y mece los pensamientos. No recuerdo mas, eso es todo, además para que recordar.
A. Nain.