Apurando la última libación de cerveza. La tome por el talle ya casi apunto de reventar de tórrido, ya no podía llevar esta cruz, necesitaba tomar al toro por las astas.
Ella se reía, sabia bien lo que estaba haciendo, gozaba provocándome, nunca la había visto tan desinhibida, desde que llegamos a ese lugar lo único que hacia era incitarme, no se lo que buscaba, pero su gozo era enorme.
De un momento a otro se paro y me dejo sentado un buen rato, yéndose a diez pasos de mi, conversaba con todos los hombres que se le acercaban y mientras realizaba eso me miraba y se reía, luego volvía me besaba y me decía que me tenia en donde ella quería, y se volvía a ir a diez pasos de mi.
Yo no entendía de que se trataba todo esto, pero sabia que realmente me tenía donde ella quería, me estaba provocando con esa sutileza que sola las mujeres conocen.
Cuando se me acerco nuevamente, me tomo de la mano y me dijo que nos fuéramos, a si que pedí la cuenta y nos fuimos de ese lugar, me dio un largo beso en la esquina en la cual estábamos y se echo a reír.
Ella se reía, sabia bien lo que estaba haciendo, gozaba provocándome, nunca la había visto tan desinhibida, desde que llegamos a ese lugar lo único que hacia era incitarme, no se lo que buscaba, pero su gozo era enorme.
De un momento a otro se paro y me dejo sentado un buen rato, yéndose a diez pasos de mi, conversaba con todos los hombres que se le acercaban y mientras realizaba eso me miraba y se reía, luego volvía me besaba y me decía que me tenia en donde ella quería, y se volvía a ir a diez pasos de mi.
Yo no entendía de que se trataba todo esto, pero sabia que realmente me tenía donde ella quería, me estaba provocando con esa sutileza que sola las mujeres conocen.
Cuando se me acerco nuevamente, me tomo de la mano y me dijo que nos fuéramos, a si que pedí la cuenta y nos fuimos de ese lugar, me dio un largo beso en la esquina en la cual estábamos y se echo a reír.
No comments:
Post a Comment